
Concédeme un instante, quizás me encuentres interesante.
Quieres que te coma las tetas.
Quieres braguetas, versos de estos poetas.
¿Quieres parar la saeta del reloj que te sujeta?
Pues quédate a vivir en mi planeta
Quieres ser mi reina de una noche,
un polvo en un coche,
un paseo a tu casa con beso en el porche.
Quieres romance, confianza, libertad sin fianza,
la pasión del primer día, el amante que no se cansa.
Quieres mordisquitos en la espalda,
surtidos bajo tu falda,
besitos ricos, clitos, gritos, mosdisquitos en la nuca...
Te gusta que pierda la calma...
¡Qué suene la alarma!
Quieres ser como los hombres quieren que seas